Todas las fotos de Giselle Marino, extraidas de enciclopediaoliveros.wordpress.com
Los primeros cuatro pisos del Museo de Arte Contemporáneo Macro (Bulevar Oroño y el río) albergan hasta al 16 de septiembre 50 obras incluidas en la muestra Enciclopedia Oliveros, pertenecientes a 31 artistas que han pasado por el dispositivo del Taller de Arte del Hospital Colonia Psiquiátrica “Dr.Abelardo Irigoyen Freyre” de la localidad de Oliveros.
Fabiana Imola, artista plástica rosarina, curadora de la muestra junto a Max Cachimba y Claudia del Río, y fundamentalmente coordinadora del taller en Oliveros, habló en De Ushuaia a la Quiaca sobre el trabajo que ahora se expone, en el marco de los festejos por los 15 años del Centro Cultural "Macedonio Fernández”. De ese lapso son los dibujos y pinturas, “producidos en un espacio particular” en el que además de “plástica, se trabaja sobre el cine, la escritura, o la carpintería”.
“La idea de esta muestra es superar la instancia de taller eligiendo de ese gran archivo de mucha obra producida. Ese fue el trabajo de la curaduría, el de seleccionar lo que son las joyitas”, explica Imola. “Pasaron muchos pacientes que fueron trabajando en el espacio, alguno de ellos con mucho reconocimiento, como el caso de Aníbal Brizuela”. En 2011 sobre su vida y obra, el cineasta Rubén Plataneo estrenó el documental "Tanke Papi".
A excepción de Brizuela, Antonio Vázquez, Enzo Nuñez, Juan Carlos Ludueña, Norma Rey, Cristina Zimmerman, Eduardo Giovanini, Oliverio de Vincenti, y el resto de los internos, “produjeron su obra en el taller”. Algunos de ellos, actualmente externados, siguen produciendo en sus casas.
“EL ARTE LOS MIRA A ELLOS COMO ARTISTAS”
Si bien la modificación en la Ley de Salud Mental, busca "generar puentes entre sus usuarios y la comunidad, mediante dispositivos de externación y de acompañamiento” e hizo que los talleres de arte “pasaran a tener un lugar importante dentro del trabajo de inserción y curación de un paciente”, a Imola le interesa también, ver la producción de los internos como arte, en el contexto de un museo.
“(El taller) es el lugar donde se pone en marcha el hacer, posibilitar que el otro pueda ser un autor, un pintor, no es nada más loco. El arte los mira a ellos como artistas, esa obra dentro del museo es una obra de artista”.
Los modos de propiciar un encuentro entre arte, salud mental e integración continúan bajo el análisis de la curadora de la muestra: “Desde qué lugar ayuda el arte, cómo puede ayudar a las personas en el sentido de que una vez que se pueden producir lazos con un trabajo y una técnica, encuentren ese espacio donde poner su subjetividad. Conectarse con una técnica ya es una terceridad, al anudar eso se desanudada la psicosis, hacer lazos con una técnica es parte de un tratamiento de cura, entre comillas por supuesto”.
“Nuestro interés es destacar esto porque viendo esta obra vos podés ver un recorrido hasta de la historia del arte. Tienen libertad y frescura y no están contaminados con lo que los artistas podemos estar contaminados por ir a ver cosas y muestras”, opina Imola. Sobre cómo viven la exposición los protagonistas, la coordinadora del taller dice que “es un momento muy importante para ellos, en esto de producir subjetividad, que puedan encontrar su obra en el museo, ellos ahí se posicionan como artistas cuando pueden mostrar su obra”.
Aparte de visitar la muestra, se recomienda ver el catálogo de Enciclopedia Oliveros que incluye una selección de obras de los artistas que participaron del taller, una serie de autobiografías realizadas durante el taller de Escritura de la Colonia que coordina Hernán Camoletto, junto textos que relatan el cómo y el porqué de este trabajo, a cargo de Franco Ingrassia, Fabiana Ímola y Claudia de Río.
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